Este hippeastrum debe ser, igualmente, resultado del cruce entre un showmaster o un charisma. En este caso el color rojo es más intenso y predominante, al contrario que en el de la anterior entrada, que, aunque no se aprecie en la fotografía que adjunté, al natural se aprecia un color anaranjado. El bulbo, después del primer trasplante desde el semillero a la maceta, convivió con otros tres que se desarrollaron homogéneamente y produjo un hijuelo. Algo que me ha llamado mucho la atención es la armonía en la coloración de los pétalos laterales y la divergencia de los pétalos centrales. Pero en su conjunto: precioso.
En primer lugar, la flor recién abierta.
En la última fotografía, la flor madura.
P.S.: Mientras estaba escribiendo esta entrada se ha producido un terremoto con epicentro en la ciudad de Lorca, que he sentido en la ciudad de Murcia, desde donde la escribo, y de una intensidad de 4,5. Así que "bautizaremos" a este como "Terremoto".
Bellísima flor!!! felicidades por tu experimento. Mi solidaridad con Lorca. un saludo
ResponderEliminarLa flor es muy bella...
ResponderEliminarMuchas gracias y bienvenidas, Mónica y Dorisalon. Con toda seguridad habréis conocido este blog a través del de Cris, una portuguesa genial. Soy un humilde aprendiz de ella, ya que me dio los primeros consejos para hacer viables las semillas que han producido estas maravillas. Con lo manazas que soy yo, todavía no me lo creo.
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